La Fiscalía rebaja a tres años la petición de cárcel para el acusado de abuso sexual continuado a su hija menor de edad
La Audiencia Provincial de Toledo ha acogido este martes, a puerta cerrada, la celebración del juicio contra J.C.O.T., acusado de un delito de abuso sexual continuado presuntamente a su hija , que, en el momento de los hechos, tenía 10 años de edad. La Fiscalía ha r ebajado de tres a seis años la petición de pena de prisión así como las peticiones de penas accesorias . La petición de la Fiscalía viene motivada por la aplicación de atenuante de dilaciones indebidas , ya que estos hechos supuestamente tuvieron lugar hace más de siete años, en enero de 2018. Una atenuante que también ha solicitado, Álvaro Escudero, abogado de la defensa que, ha mantenido la petición de absolución para J.C.O.T., y que ha explicado que, en caso de que se produjera una sentencia condenatoria, se tuviera en cuenta esta demora. Según el escrito de la Fiscalía, los hechos que han sido juzgados tuvieron lugar el 20 de enero de 2018 cuando el acusado, tras su separación de su mujer, con quien tuvo una relación sentimental, se encontraba pasando el fin de semana en su domicilio en compañía de los tres hijos menores de edad de ambos. Durante la siesta de los menores , el hombre entró en la habitación de su hija, quien le pidió que le hiciera cosquillas en la espalda para dormir. En ese momento, según el relato del Ministerio Público, el acusado, sin deprenderse de ninguna pieza de ropa ni quitársela tampoco a la menor, aprovechando la situación y relación afectiva que les unía, solicitó a la menor que se subiera encima de él. Acto seguido, introdujo sus manos por debajo del pantalón y ropa interior de la menor, tocándole mientras la apretaba contra sí mientras la restregaba sus genitales en erección. En ese momento, entró en la habitación su hijo menor, de 4 años de edad por entonces, por lo que el acusado a apartó rápidamente a la chica para evitar ser descubierto. Luego le dijo a su hija que esas caricias no se las contara a nadie. Esa misma noche, el acusado, vistiendo solo ropa interior, insistió en mantener contacto físico con la menor, repitiendo los tocamientos mientras estaban acostados en la misma cama. La niña logró alejarse en un momento en que su padre se distrajo con su teléfono móvil, pero posteriormente se acercó nuevamente hija, realizándole nuevos tocamientos en los glúteos, los cuales solamente se detuvieron cuando la menor le pidió expresamente a su padre que parase. Durante los días siguientes, según la acusación, el hombre conminó a su hija a no contar lo sucedido a nadie, ni siquiera a su madre.
La Audiencia Provincial de Toledo ha acogido este martes, a puerta cerrada, la celebración del juicio contra J.C.O.T., acusado de un delito de abuso sexual continuado presuntamente a su hija , que, en el momento de los hechos, tenía 10 años de edad. La Fiscalía ha r ebajado de tres a seis años la petición de pena de prisión así como las peticiones de penas accesorias . La petición de la Fiscalía viene motivada por la aplicación de atenuante de dilaciones indebidas , ya que estos hechos supuestamente tuvieron lugar hace más de siete años, en enero de 2018. Una atenuante que también ha solicitado, Álvaro Escudero, abogado de la defensa que, ha mantenido la petición de absolución para J.C.O.T., y que ha explicado que, en caso de que se produjera una sentencia condenatoria, se tuviera en cuenta esta demora. Según el escrito de la Fiscalía, los hechos que han sido juzgados tuvieron lugar el 20 de enero de 2018 cuando el acusado, tras su separación de su mujer, con quien tuvo una relación sentimental, se encontraba pasando el fin de semana en su domicilio en compañía de los tres hijos menores de edad de ambos. Durante la siesta de los menores , el hombre entró en la habitación de su hija, quien le pidió que le hiciera cosquillas en la espalda para dormir. En ese momento, según el relato del Ministerio Público, el acusado, sin deprenderse de ninguna pieza de ropa ni quitársela tampoco a la menor, aprovechando la situación y relación afectiva que les unía, solicitó a la menor que se subiera encima de él. Acto seguido, introdujo sus manos por debajo del pantalón y ropa interior de la menor, tocándole mientras la apretaba contra sí mientras la restregaba sus genitales en erección. En ese momento, entró en la habitación su hijo menor, de 4 años de edad por entonces, por lo que el acusado a apartó rápidamente a la chica para evitar ser descubierto. Luego le dijo a su hija que esas caricias no se las contara a nadie. Esa misma noche, el acusado, vistiendo solo ropa interior, insistió en mantener contacto físico con la menor, repitiendo los tocamientos mientras estaban acostados en la misma cama. La niña logró alejarse en un momento en que su padre se distrajo con su teléfono móvil, pero posteriormente se acercó nuevamente hija, realizándole nuevos tocamientos en los glúteos, los cuales solamente se detuvieron cuando la menor le pidió expresamente a su padre que parase. Durante los días siguientes, según la acusación, el hombre conminó a su hija a no contar lo sucedido a nadie, ni siquiera a su madre.
