La Europol advierte de que la IA está impulsando el crimen organizado

“El ADN del crimen organizado está cambiando”, y en su núcleo está entrando la inteligencia artificial (IA), según alerta la Europol, la policía europea, en su último informe sobre la evaluación de la amenaza de la delincuencia grave y organizada en la Unión Europea, publicado este miércoles.

El informe. Basado en información de los Estados miembros de la UE y de los socios internacionales encargados de hacer cumplir la ley, el informe revela que la composición y la manera de actuar dentro del crimen organizado “está cambiando radicalmente, volviéndolo más arraigado y desestabilizador que nunca”.

• Los delitos que más se detectan son los relacionados con ciberataques, fraude en línea, la explotación sexual infantil, el tráfico de migrantes, de drogas, de armas de fuego y delitos de residuos.

La organización apunta que, aunque muchos de estos delitos se desarrollan en el mundo físico, los elementos de todo proceso delictivo se trasladan cada vez más a Internet: desde el reclutamiento y la comunicación hasta los sistemas de pago y la automatización impulsada por IA.  

• Por ejemplo, en el caso de la explotación sexual infantil online, esta tecnología permite producir material de abuso sexual infantil con inteligencia artificial generativa y facilita la captación de menores en la red.

La IA como potenciador del crimen organizado. La Europol señala que los delincuentes saben cómo explotar rápidamente las nuevas tecnologías, utilizándolas como motor de eficiencia. Es por ello que la IA, que está mutando hacia una potencia capaz de hacer cosas cada vez más sofisticadas y adaptadas, también se está convirtiendo “en una poderosa arma para las redes delictivas”.

• Sus características. “Estas tecnologías automatizan y amplían las operaciones delictivas, haciéndolas más escalables y difíciles de detectar”. “Los ataques impulsados por IA se están volviendo más precisos y devastadores”, ha afirmado la directora general de Europol, Catherine De Bolle. 

• Los objetivos. El cibercrimen tiene como objetivo a gobiernos, empresas e individuos. “Algunos ataques muestran una combinación de motivos de lucro y desestabilización, ya que están cada vez más alineados con el Estado y motivados ideológicamente”, añadió De Bolle.

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