La ecuación de 'Cifras y Letras' resolvió la gran incógnita: La 2 consolida la cultura con grandes audiencias
La tarea no fue nada fácil, pero la paciencia dio paso al éxito. Cifras y Letras es un viejo conocido de la televisión en abierto, un concurso que ha acompañado a distintas generaciones a lo largo de la historia. Desde distintas televisiones de ámbito nacional y autonómico, este formato siempre se presentó con el aprendizaje como su principal seña de identidad. Y lo cierto es que recuperarlo fue un completo acierto: Televisión Española (TVE) planteó una ecuación que consolidó la cultura en La 2 con grandes audiencias. Un crecimiento histórico que refuerza el formato El pasado mes de febrero, Cifras y Letras alcanzó su mejor dato desde su regreso a La 2, registrando un 5,4% de cuota de pantalla y 710.000 espectadores de media. Se trata de una subida con escasos precedentes dentro de la cadena, que en el mismo periodo firmó un 2,8% de cuota mensual. En términos absolutos, el concurso se colocó muy por encima del rendimiento de la cadena, con un incremento del 92,86% sobre el promedio mensual. El crecimiento ha sido progresivo. Desde su regreso en enero de 2024 con un 3,0% de cuota, el concurso ha ido consolidándose como una de las apuestas más estables de la cadena. El punto de inflexión llegó en la recta final del año, cuando el formato superó por primera vez el 4% de cuota en octubre y continuó en ascenso hasta cerrar diciembre con un 4,9%. Y es que esta apuesta llegó a la televisión para demostrar el interés del público en este tipo de contenidos, además de una gran capacidad para atraer nuevos espectadores. Un oasis cultural en una franja de gran competencia El impacto de Cifras y Letras cobra aún mayor relevancia si se tiene en cuenta el contexto de su emisión. El programa forma parte de las ofertas programadas para el access prime time, una de las franjas más disputadas de nuestra televisión. En este horario, La 2 compite con propuestas generalistas de gran peso con audiencias masivas. Estamos hablando de El Hormiguero en Antena 3 y La Revuelta en La 1, que en febrero registraron un 14,9% de cuota y 2.009.000 espectadores, y un 3,2% de share con 1.626.000 seguidores, respectivamente. Frente a estos gigantes del entretenimiento, Cifras y Letras ha conseguido mantener una base sólida de espectadores, demostrando que la cultura también puede funcionar en horario estelar. Su rendimiento en audiencias refuerza una realidad poco explorada hasta que TVE decidió dar el paso: existe una audiencia fiel para los formatos de divulgación y entretenimiento educativo, incluso en un horario dominado por el entretenimiento más comercial. Con este ascenso digno de mención, la pregunta ahora es si Cifras y Letras podrá seguir rompiendo su propio techo o si ya ha alcanzado su punto álgido. Lo que está claro es que, por ahora, La 2 ha encontrado en este concurso su mejor ecuación para consolidar la cultura en la televisión lineal. Veremos si se resuelve pronto la incógnita.
La tarea no fue nada fácil, pero la paciencia dio paso al éxito. Cifras y Letras es un viejo conocido de la televisión en abierto, un concurso que ha acompañado a distintas generaciones a lo largo de la historia. Desde distintas televisiones de ámbito nacional y autonómico, este formato siempre se presentó con el aprendizaje como su principal seña de identidad. Y lo cierto es que recuperarlo fue un completo acierto: Televisión Española (TVE) planteó una ecuación que consolidó la cultura en La 2 con grandes audiencias. Un crecimiento histórico que refuerza el formato El pasado mes de febrero, Cifras y Letras alcanzó su mejor dato desde su regreso a La 2, registrando un 5,4% de cuota de pantalla y 710.000 espectadores de media. Se trata de una subida con escasos precedentes dentro de la cadena, que en el mismo periodo firmó un 2,8% de cuota mensual. En términos absolutos, el concurso se colocó muy por encima del rendimiento de la cadena, con un incremento del 92,86% sobre el promedio mensual. El crecimiento ha sido progresivo. Desde su regreso en enero de 2024 con un 3,0% de cuota, el concurso ha ido consolidándose como una de las apuestas más estables de la cadena. El punto de inflexión llegó en la recta final del año, cuando el formato superó por primera vez el 4% de cuota en octubre y continuó en ascenso hasta cerrar diciembre con un 4,9%. Y es que esta apuesta llegó a la televisión para demostrar el interés del público en este tipo de contenidos, además de una gran capacidad para atraer nuevos espectadores. Un oasis cultural en una franja de gran competencia El impacto de Cifras y Letras cobra aún mayor relevancia si se tiene en cuenta el contexto de su emisión. El programa forma parte de las ofertas programadas para el access prime time, una de las franjas más disputadas de nuestra televisión. En este horario, La 2 compite con propuestas generalistas de gran peso con audiencias masivas. Estamos hablando de El Hormiguero en Antena 3 y La Revuelta en La 1, que en febrero registraron un 14,9% de cuota y 2.009.000 espectadores, y un 3,2% de share con 1.626.000 seguidores, respectivamente. Frente a estos gigantes del entretenimiento, Cifras y Letras ha conseguido mantener una base sólida de espectadores, demostrando que la cultura también puede funcionar en horario estelar. Su rendimiento en audiencias refuerza una realidad poco explorada hasta que TVE decidió dar el paso: existe una audiencia fiel para los formatos de divulgación y entretenimiento educativo, incluso en un horario dominado por el entretenimiento más comercial. Con este ascenso digno de mención, la pregunta ahora es si Cifras y Letras podrá seguir rompiendo su propio techo o si ya ha alcanzado su punto álgido. Lo que está claro es que, por ahora, La 2 ha encontrado en este concurso su mejor ecuación para consolidar la cultura en la televisión lineal. Veremos si se resuelve pronto la incógnita.
