Isaiah Collier y el tan ansiado base de los Jazz

Es muy difícil recibir la atención de medios de comunicación y analistas cuando juegas en uno de los mercados más pequeños de la NBA y tu equipo se sitúa en la última posición de la Conferencia Oeste. Pero la temporada de debut Isaiah Collier merece, cuando menos, unas humildes líneas que sirvan como carta de presentación.

Tras ser seleccionado en la 29ª posición del draft de 2024 por los Utah Jazz —lo cual ya invitó a pensar en él como posible robo del draft pues había llegado a sonar previamente como potencial pick 1—, el base comenzó el curso con una intermitencia residual en la rotación, llegando incluso a pasar algún que otro periodo menor en las filas del equipo de la G-League.

Todo cambió a comienzos de enero. Unos problemas físicos en el pie izquierdo de Jordan Clarkson y el definitivo abandono de la idea de situar a Keyonte George como base titular, empujó a Will Hardy a echar mano de Isaiah Collier como principal generador de juego en el quinteto inicial. Y si bien comenzó de forma tímida, su desarrollo se aceleró a pasos agigantados hasta culminar este pasado sábado, cuando registró 14 asistencias en la victoria sobre Minnesota Timberwolves.

No hablamos, ni mucho menos, de un partido aislado, pues si algo ha caracterizado a Isaiah Collier en las últimas fechas ha sido la regularidad. Al menos en lo que a dirigir juego se refiere. En el último mes —13 partidos en su caso— el rookie ha promediado 9,6 asistencias por encuentro, una cifra tan solo superada por Trae Young (11,1) y Nikola Jokic (10,9).

Evidentemente, Collier, quien no cumplirá 21 años hasta octubre, todavía tiene mucho trabajo por delante y áreas concretas en las que incidir, principalmente en lo que respecta su tiro en suspensión y tener un mayor control de las pérdidas de balón. Su temprana irrupción, eso sí, ha servido para que los Jazz den un portazo al que había sido su principal quebradero de cabeza en las últimas tres campañas.

Desde la salida de Mike Conley a rumbo a Minnesota Timberwolves en febrero de 2023, la franquicia de Salt Lake City había dado tumbos en lo que respecta a concretar quién sería el encargado de llevar las manijas de la ofensiva, donde probaron, sin suerte, perfiles como Jordan Clarkson, Collin Sexton, Keyonte George, Talen Horton-Tucker o Kris Dunn, todos ellos con sus virtudes, pero sin la lectura de juego y la templanza necesarias para aportar cierto criterio al equipo.

Ahora ha sido Isaiah Collier el que ha tomado las riendas y no es casualidad que, desde su salto al quinteto titular, los Jazz hayan comenzado, por fin, a jugar a baloncesto. Esto, a su vez, ha dado a un núcleo muy joven un impulso extra de confianza para el futuro.

Novatos ya no tan novatos

Isaiah Collier no es el único novato en el vestuario de los Utah Jazz. Cody Williams fue elegido en décima posición del último draft y el nombre de Kyle Filipowski no salió hasta la 32ª posición. Curiosamente, ha sido el pick propio de lotería, Williams, el que más dudas ha creado hasta el momento.

En todo caso, el técnico de los Jazz, Will Hardy, considera que el tiempo inicial de aprendizaje ha finalizado y que los rookies ya están listo para afrontar una nueva etapa en la NBA. A partir de ahora, Hardy y su cuerpo técnico serán mucho más exigentes con los tres.

«Creo que es hora de graduarse”, afirmó el entrenador. «Los novatos ya no son novatos. Tienen mucha experiencia. Eso no significa que espere la perfección de ellos, pero saben lo que se espera de ellos en ambos lados de la cancha. Todavía habrá preguntas a veces. Todavía habrá momentos de clarificación, que siempre ocurren en cualquier equipo, pero ya deberían ser menos en este momento».

(Fotografía de portada de Rob Gray-Imagn Images)

La entrada Isaiah Collier y el tan ansiado base de los Jazz se publicó primero en NBAManiacs.