Integrar los temas ASG en el programa de gestión de riesgo empresarial, clave para 2025

Forbes México. Integrar los temas ASG en el programa de gestión de riesgo empresarial, clave para 2025 La gestión de riesgos ASG no se debe abordar como un elemento separado o como un ejercicio adicional, ya que actualmente estos factores son un componente fundamental para la sostenibilidad y el éxito estratégico de cualquier compañía. Integrar los temas ASG en el programa de gestión de riesgo empresarial, clave para 2025 Invitado Forbes

Feb 21, 2025 - 13:58
 0
Integrar los temas ASG en el programa de gestión de riesgo empresarial, clave para 2025

Forbes México.
Integrar los temas ASG en el programa de gestión de riesgo empresarial, clave para 2025

FMI-crisis-climatica

Por José Carlos Ortiz*

El inicio de 2025 representa una oportunidad clave para que las organizaciones, como parte de su plan estratégico, reflexionen y replanteen los riesgos empresariales que enfrentan. Asimismo, este año se presenta como el momento idóneo para incorporar, de manera integral, los factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG) dentro del programa de gestión de riesgo empresarial (ERM, por sus siglas en inglés). 

En este sentido, es importante destacar que la gestión de riesgos ASG no se debe abordar como un elemento separado o como un ejercicio adicional, ya que actualmente estos factores son un componente fundamental para la sostenibilidad y el éxito estratégico de cualquier compañía.

La evolución de los mercados, la creciente presión de los inversionistas y las nuevas expectativas de la sociedad exigen que las empresas se comprometan con la agenda ASG, considerando que tanto los entes reguladores como los grupos de interés, incluyendo clientes, colaboradores, comunidades y proveedores, valoran cada vez más la forma en que las organizaciones gestionan los temas de sostenibilidad, inclusión y transparencia. 

En este contexto, conforme evolucionan los aspectos ASG, se espera que durante 2025 y en los próximos años se implementen nuevas regulaciones y estándares relacionados con la divulgación de información no financiera, entre las cuales destacan las Normas de Información de Sostenibilidad (NIS), emitidas por el Consejo Mexicano de Normas de Información Financiera (Cinif) en 2024, lo que aumenta la visibilidad y el control sobre estos temas.

Así, incorporar una perspectiva ASG dentro del programa de ERM no es simplemente una tendencia sin resultados tangibles, sino un factor para que las empresas anticipen cambios en su entorno, respondan con agilidad y generen valor a largo plazo. Dicha perspectiva debe considerar:

1. La importancia del programa de ERM y su evolución

En las últimas décadas, el programa de ERM ha dejado de ser un requisito de cumplimiento para convertirse en un marco estratégico integral que permite identificar, evaluar y gestionar los riesgos que pueden afectar los objetivos de las organizaciones; un cambio particularmente notable después de la pandemia de 2020.

Sin embargo, la acelerada transformación digital, junto con una mayor conciencia y atención a temas globales como el cambio climático, la diversidad, equidad e inclusión (DEI), y la gobernanza, han provocado que el mapa de riesgos se expanda y cambie drásticamente. En este sentido, la capacidad de las empresas para sobrevivir y prosperar radica en su habilidad para adaptar sus procesos de gestión de riesgos a estas nuevas realidades, integrando los factores ASG de manera transversal y sistemática.

2. Los temas ASG como parte esencial del programa de ERM

Como se mencionó anteriormente, incluir los aspectos ASG dentro del programa de ERM no es solo un ejercicio de cumplimiento o una estrategia para mejorar la imagen, sino un elemento esencial para salvaguardar la reputación de las empresas, atraer inversión y garantizar la sostenibilidad de la operación a largo plazo. Algunos de los riesgos más relevantes son:

a) Cambios regulatorios y sanciones

Cada vez más países y organismos internacionales están emitiendo regulaciones específicas en materia de emisiones de carbono, respeto a los derechos humanos y transparencia corporativa. Ignorar estos requerimientos puede derivar en multas significativas, pérdida de licencias o incluso la suspensión de operaciones.

b) Afectación de la reputación

El escrutinio público hacia las empresas que no cumplen con estándares mínimos de responsabilidad social o gobernanza puede erosionar la confianza de clientes e inversionistas. Este deterioro reputacional puede tardar años en revertirse y generar un alto costo económico.

c) Cambio climático y continuidad del negocio 

El aumento de eventos climáticos extremos, como inundaciones, sequías o incendios puede interrumpir las cadenas de suministro y forzar el cierre temporal o definitivo de instalaciones. Por ello, las organizaciones que no integren la resiliencia climática en sus estrategias de ERM serán más vulnerables a estos eventos disruptivos.

d) Escasez de talento y conflictos laborales

La fuerza laboral, particularmente las generaciones más jóvenes, valoran cada vez más la responsabilidad social de las compañías, por lo que si no se presta atención a la DEI y el bienestar de los colaboradores, se corre el riesgo de perder y no lograr atraer talento calificado.

e) Sostenibilidad financiera a largo plazo

Los inversionistas institucionales y los fondos de capital consideran cada vez más importantes las métricas ASG para tomar decisiones de inversión. Por ende, las empresas que no demuestren un compromiso claro con la sostenibilidad y la responsabilidad social podrían quedar fuera del radar de inversión, limitando su acceso a capital.

Un ejemplo claro de la importancia de integrar la perspectiva ASG en el mapa de riesgos es la gestión de la cadena de suministro, ya que muchas organizaciones dependen de proveedores en distintas regiones, por lo que para garantizar la continuidad de sus operaciones deben asegurarse de que sus socios comerciales cumplan con los estándares mínimos en condiciones laborales, respeto ambiental y gobernanza. Un escándalo por explotación laboral o contaminación irresponsable puede impactar significativamente la imagen y el desempeño financiero de una empresa, tanto a corto como a largo plazo.

3. Cómo integrar ASG en el programa de ERM

La integración de los criterios ASG en el programa de ERM, requiere de un enfoque sistemático, transversal y multidisciplinario que abarque todos los niveles de la organización. Para lograrlo, es necesario implementar los siguientes pasos:

a) Diagnóstico y priorización

El primer paso consiste en realizar un diagnóstico profundo para identificar los temas ASG más relevantes para la compañía, considerando factores como la industria, la geografía y los grupos de interés clave. Con base en esta evaluación se deben priorizar los aspectos que representen mayor impacto estratégico, ya sea como riesgos críticos u oportunidades para generar valor.

b) Desarrollo de métricas e indicadores

Para garantizar una integración efectiva es indispensable establecer indicadores clave de desempeño (KPI, por sus siglas en inglés) claros y medibles. Esto permite alinear a toda la organización con los objetivos estratégicos y monitorear el progreso de manera continua.

c) Gobernanza y responsabilidad

La supervisión de los temas ASG debe estar a cargo de un comité u organismo formal dentro de la estructura de gobernanza de la compañía. Esta instancia debe estar facultada para tomar decisiones estratégicas y reportar directamente a la Alta Dirección o al Consejo de Administración, garantizando así su relevancia y visibilidad.

d) Capacitación y cultura organizacional

La integración efectiva de los aspectos ASG requiere de la sensibilización y capacitación de todas y todos los colaboradores en estos temas, así como de la promoción de una cultura organizacional que fomente la responsabilidad y la colaboración. De esta forma, se asegura que la gestión de riesgos ASG no sea un asunto exclusivo del nivel C, sino un esfuerzo compartido por toda la compañía.

e) Monitoreo y comunicación

La retroalimentación continua, tanto interna como externa, es crucial para ajustar la estrategia de manera oportuna. Además, es esencial mantener un diálogo constante y transparente con las partes interesadas, comunicando los avances y desafíos en la gestión de riesgos ASG.

4. Retos y oportunidades hacia 2025

En definitiva, 2025 presenta un panorama desafiante, pero lleno de oportunidades para las organizaciones que buscan alinear sus objetivos estratégicos con las demandas crecientes de la sociedad y los mercados. Asimismo, la integración de los factores ASG en el programa de ERM no está exenta de desafíos; sin embargo, también puede generar ventajas competitivas únicas:

a) Transformación digital y disrupción tecnológica

La adopción de herramientas tecnológicas como la inteligencia artificial (IA) y el análisis de datos puede ayudar a optimizar la gestión de riesgos ASG, proporcionando información en tiempo real para la toma de decisiones; no obstante, esta transformación conlleva nuevos riesgos relacionados con la ciberseguridad y la privacidad de datos.

b) Alianzas estratégicas y colaboración

Muchos de los desafíos ASG, como el cambio climático o las presiones sociales, a menudo exceden la capacidad de una sola empresa para enfrentarlos. Por ello, resulta esencial establecer alianzas con otras compañías, gobiernos y organizaciones de la sociedad civil para coordinar esfuerzos y reducir la exposición al riesgo de manera compartida, particularmente en relación con la innovación y la inversión en infraestructuras más sostenibles.

c) Generación de valor compartido

Incorporar los criterios ASG en la estrategia de riesgos puede traducirse en nuevos modelos de negocio, así como en productos y servicios innovadores que generen valor tanto para la compañía como para la sociedad. En este sentido, el compromiso con la sostenibilidad y la ética empresarial puede fortalecer la lealtad de los clientes, mejorar la percepción de marca y facilitar el acceso a financiamiento sostenible. 

En este contexto, el panorama global de 2025 deja claro que el programa de ERM no puede basarse en enfoques tradicionales, ya que las tres dimensiones que componen los factores ASG ya no son complementarias, sino fundamentales para la estrategia, la reputación y la sostenibilidad del negocio.

Sin duda, la creciente importancia de los temas ASG obliga a las organizaciones a anticiparse y comprender la magnitud de estos desafíos. Aquellas que adopten una gestión sólida estarán mejor posicionadas para anticiparse a las tendencias, cumplir con los requisitos legales y normativos, fortalecer su reputación y generar valor sostenible para sus grupos de interés.

Más allá de actualizar el mapa de riesgos, 2025 representa una oportunidad para construir empresas responsables, resilientes y preparadas para el futuro. Integrar plenamente y de manera continua los criterios ASG en la ERM no es una tarea más en la lista de pendientes, sino un imperativo estratégico que definirá el éxito de las compañías en las próximas décadas.

Contacto:

*José Carlos Ortiz, Socio de Asesoría en Gobierno Corporativo, Riesgo y Cumplimiento de KPMG México

Nota: las ideas y opiniones expresadas en este escrito son de quienes firman el artículo y no necesariamente representan las ideas y opiniones de KPMG México.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

Sigue la información sobre los negocios y la actualidad en Forbes México

¿Te gusta informarte por Google News? Sigue nuestro Showcase para tener las mejores historias

Integrar los temas ASG en el programa de gestión de riesgo empresarial, clave para 2025
Invitado Forbes