Illa ordena al Govern "dar la cara" para hacer frente a su primera gran crisis de Rodalies
"Dar la cara por Rodalies". Es la orden que ha dado el president Salvador Illa ante la primera gran crisis por el mal funcionamiento de la red ferroviaria de Catalunya que afronta su Govern. Tras una semana de trenes suprimidos, acumulación de retrasos, averías, apagones informativos y evacuación de pasajeros que incluso acabaron caminando por las vías, el jefe de la Generalitat dio un paso al frente pidiendo "disculpas" el viernes a los usuarios afectados. Ahora, tiene por delante días clave para demostrar que Rodalies es una prioridad de su mandato. Los primeros gestos: la reunión con el ministerio de Transportes, Renfe y Adif que la consellera Sílvia Paneque forzó el domingo para anunciar un plan de choque y su presencia este lunes a primera hora de la mañana en el Centro de Gestión de Operaciones, en la estación del Clot-Aragó. Todo, mientras la oposición aprieta con peticiones de dimisiones y un pleno monográfico en el Parlament y está en marcha la contrarreloj para intentar que los sindicatos desconvoquen la huelga de siete días en Renfe que arrancará el próximo lunes por el traspaso del servicio a la Generalitat.Seguir leyendo....

"Dar la cara por Rodalies". Es la orden que ha dado el president Salvador Illa ante la primera gran crisis por el mal funcionamiento de la red ferroviaria de Catalunya que afronta su Govern. Tras una semana de trenes suprimidos, acumulación de retrasos, averías, apagones informativos y evacuación de pasajeros que incluso acabaron caminando por las vías, el jefe de la Generalitat dio un paso al frente pidiendo "disculpas" el viernes a los usuarios afectados. Ahora, tiene por delante días clave para demostrar que Rodalies es una prioridad de su mandato. Los primeros gestos: la reunión con el ministerio de Transportes, Renfe y Adif que la consellera Sílvia Paneque forzó el domingo para anunciar un plan de choque y su presencia este lunes a primera hora de la mañana en el Centro de Gestión de Operaciones, en la estación del Clot-Aragó. Todo, mientras la oposición aprieta con peticiones de dimisiones y un pleno monográfico en el Parlament y está en marcha la contrarreloj para intentar que los sindicatos desconvoquen la huelga de siete días en Renfe que arrancará el próximo lunes por el traspaso del servicio a la Generalitat.