Frases, oraciones y lecturas para el miércoles de cenizas
En esta jornada de reflexión y ayuno se pueden compartir dedicatorias y rezos con la finalidad de una conversión espiritual

El miércoles de cenizas es el día que marca el inicio de la Cuaresma y es una jornada de conversión y arrepentimiento para los católicos, con miras a la Pascua, y una excelente oportunidad para recurrir a frases y oraciones alusivas.
Se trata de una fecha de suma importancia para la Iglesia católica en la que la ceniza simboliza la humildad ante Dios y la reflexión y arrepentimiento de los pecados.
Al igual que lo que sucede en los viernes de la Cuaresma, es un día en el que rige la abstinencia de comer carnes y una oportunidad para ofrecer a Dios un sacrificio en pos de lograr una conversión espiritual.
Para conmemorar el miércoles de cenizas es posible compartir algunas frases referidas a la fecha o elevar una oración vinculada a este día reflexivo.
Frases para el Miércoles de Cenizas
- Jesús, que cada sacrificio que haga en esta Cuaresma sea una muestra de mi amor por Ti y por los demás.
- Señor, enséñame a ofrecer mis pequeñas renuncias con alegría y generosidad, recordando todo lo que hiciste por mí.
- Señor, dame la gracia de desapegarme de lo material y de buscarte con todo mi corazón.
- Jesús, dame la gracia de orar no solo con palabras, sino también con mis acciones y mi testimonio de vida.
- Padre bueno, ayúdame a reconocer mis debilidades y a trabajar en ellas con humildad y paciencia.
- Señor, que el arrepentimiento sincero sea el primer paso para cambiar y mejorar cada día.
- Señor, dame la gracia de ver a los demás con compasión y de tratar a todos con bondad y paciencia.
Oraciones para el Miércoles de Cenizas
- Señor, en este Miércoles de Ceniza, te pedimos que nos ayudes a reconocer nuestras faltas y a empezar este tiempo de Cuaresma con un corazón sincero y dispuesto a cambiar.
- Padre misericordioso, que esta ceniza en nuestra frente nos recuerde que somos polvo y al polvo volveremos, pero en Ti encontramos la vida eterna.
- Jesús, acompáñanos en este camino de conversión, para que aprendamos a vivir con humildad, amor y generosidad hacia los demás.
- Espíritu Santo, danos la fortaleza para renunciar a lo que nos aleja de Dios y para vivir esta Cuaresma con fe y esperanza. Señor, que este tiempo de oración, ayuno y caridad nos acerque más a Ti y nos ayude a preparar nuestro corazón para la alegría de la Pascua.

Lecturas en el miércoles de cenizas
Evangelio (Mt 6,1-6.16-18): En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de lo contrario no tendréis recompensa de vuestro Padre celestial. Por tanto, cuando hagas limosna, no lo vayas trompeteando por delante, como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles, con el fin de ser honrados por los hombres; en verdad os digo que ya reciben su paga. Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha; así tu limosna quedará en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará”.
Joel (2, 12-18): Ahora dice el Señor: Vuelvan a mí de todo corazón, con ayuno, llantos y lamentos. Desgarren su corazón y no sus vestiduras, y vuelvan al Señor, su Dios, porque Él es bondadoso y compasivo, lento para la ira y rico en fidelidad, y se arrepiente de sus amenazas. ¡Quién sabe si él no se volverá atrás y se arrepentirá, y dejará detrás de sí una bendición: la ofrenda y la libación para el Señor, su Dios! ¡Toquen la trompeta en Sión, prescriban un ayuno, convoquen a una reunión solemne, reúnan al pueblo, convoquen a la asamblea, congreguen a los ancianos, reúnan a los pequeños y a los niños de pecho! ¡Que el recién casado salga de su alcoba y la recién casada de su lecho nupcial! Entre el vestíbulo y el altar lloren los sacerdotes, los ministros del Señor, y digan: “¡Perdona, Señor, a tu pueblo, no entregues tu herencia al oprobio, y que las naciones no se burlen de ella! ¿Por qué se ha de decir entre los pueblos: Dónde está su Dios?” El Señor se llenó de celos por su tierra y se compadeció de su pueblo.