El puerto USB-C es una de las piezas más delicadas de nuestro móvil. Así hay que cuidarlo para que no se rompa
Ahora que tenemos un puerto universal, el USB C, es más sencillo que todos los fabricantes de dispositivos, y por supuesto los usuarios, se pongan de acuerdo. A la hora de elegir un cable, debemos ser cuidadosos con ciertos aspectos, puesto que no es lo mismo un cable barato que uno premium, las pruebas están ahí. Sin embargo, la carga del móvil no solo depende del cable, sino también del puerto: es uno de los elementos más delicados. Un mal golpe, una extracción de cable violenta o simplemente la entrada de polvo y agua pueden dañar una parte crítica. Sin el puerto de carga USB C, nuestro teléfono no volverá a cargar, lo que significa el fin de su vida en cuanto el porcentaje de batería caiga al 0%. Tarde o temprano sucederá, pero con estos consejos alargarás su vida útil tanto como la del propio dispositivo. Causas comunes por las que un USB C se estropea Debido a su tamaño, es una pieza que está bastante expuesta, y además es susceptible a daños si no la tratamos como es debido. Entre las causas comunes por las que el puerto USB C del móvil puede dañarse, sobresale el mal uso que le damos como usuarios. Una conexión o desconexión brusca, el uso de cables de baja calidad, o la reiteración de estas acciones en poco tiempo desgastan el puerto USB C, aunque evidentemente, no es la única razón: la acumulación de suciedad, como polvo, pelusas y otros residuos (restos orgánicos, textiles) pueden provocar un mal funcionamiento. En Xataka Android Google la lía en todo el mundo y estos Chromecast dejan de funcionar: reiniciarlos no sirve de nada De igual manera, y a pesar de que muchos teléfonos son resistentes a la entrada de agentes externos (lo marca su certificación IP en relación al agua y polvo), que el puerto se exponga a líquidos puede provocar corrosión y cortocircuitos. Y no olvidemos el desgaste natural que como cualquier otra cosa en la vida, termina afectando. Cuando hablamos de que el puerto se rompe, no tiene porque dejar de funcionar completamente. Puede presentar un comportamiento anómalo, lo que se llama comúnmente un "mal contacto", y que cargue en ocasiones o solo en ciertas posturas. Todo dependerá de la causa y la gravedad del daño, que por ejemplo un cortocircuito lo arruinará para siempre. En cambio, un desgaste menor puede presentarse en forma de carga lenta. Cuidar el puerto USB-C es cuestión de lógica Como pieza pequeña que es, conviene tratarlo como se merece, más aún considerando la gran importancia que tiene. En ciertos momentos, no podemos evitar dar un tirón (salir de casa con prisas no es bueno); en otras, no podemos evitar que se moje o se humedezca, pero el cuidado se aplica cada día, y se aprecia en el largo plazo. Algunas recomendaciones para cuidar el puerto USB-C de tu móvil son: Conecta y desconecta el cable con suavidad, sin movimientos bruscos ni ángulos extremos. Limpia el puerto regularmente: usa aire comprimido o un cepillo suave. Nunca usar objetos metálicos o punzantes. Utiliza cable y cargador original, o en su defecto certificados por el fabricante o que provengan de marcas confiables. Evita entornos húmedos y las altas temperaturas. Si no queda más remedio que mojarlo, sécalo inmediatamente en cuanto salga del agua. No menos importante es el orden óptimo de carga. ¿Sabes en qué orden debes conectar cable, cargador y móvil? La forma más segura de cuidar de nuestros cables y teléfonos es unir primero el móvil al cargador (cable mediante) sin conectarlo a la corriente. Una vez hecho, procede a enchufarlo a la toma de pared. Así evitamos una pequeña chispa que se da por los voltajes positivos y negativos cuando insertamos el cable en el teléfono. Además de los cuidados mencionados anteriormente, podemos recurrir a accesorios externos para protegerlo. Por ejemplo, el uso de tapones evitará que entre suciedad, y de paso lo protege ante golpes directos. Algunas fundas los incorporan, también puedes adquirirlos por separado. De esta manera, el puerto de carga aguantará mejor el paso del tiempo, y por ende el teléfono también prolongará su vida útil. El cuidado preventivo es clave para mantenerlo en buen estado, que cuando presenta fallos solo nos quedará pasar por el servicio técnico (con la espera que conlleva) o repararlo nosotros mismos (habrá que asumir la pérdida de garantía). En Xataka Android | Entretener a tus pasajeros con Android Auto es fácil si sabes cómo compartir la pantalla de tu móvil En Xataka Android | Estas funciones llegaron con Android 15 y no puedo vivir sin ellas. Precisamente por eso se ha convertido en mi versión favorita - La noticia El puerto USB-C es una de las piezas más delicadas de nuestro móvil. Así hay que cuidarlo para que no se rompa fue publicada originalmente en Xataka A

Ahora que tenemos un puerto universal, el USB C, es más sencillo que todos los fabricantes de dispositivos, y por supuesto los usuarios, se pongan de acuerdo. A la hora de elegir un cable, debemos ser cuidadosos con ciertos aspectos, puesto que no es lo mismo un cable barato que uno premium, las pruebas están ahí. Sin embargo, la carga del móvil no solo depende del cable, sino también del puerto: es uno de los elementos más delicados.
Un mal golpe, una extracción de cable violenta o simplemente la entrada de polvo y agua pueden dañar una parte crítica. Sin el puerto de carga USB C, nuestro teléfono no volverá a cargar, lo que significa el fin de su vida en cuanto el porcentaje de batería caiga al 0%. Tarde o temprano sucederá, pero con estos consejos alargarás su vida útil tanto como la del propio dispositivo.
Causas comunes por las que un USB C se estropea

Debido a su tamaño, es una pieza que está bastante expuesta, y además es susceptible a daños si no la tratamos como es debido. Entre las causas comunes por las que el puerto USB C del móvil puede dañarse, sobresale el mal uso que le damos como usuarios.
Una conexión o desconexión brusca, el uso de cables de baja calidad, o la reiteración de estas acciones en poco tiempo desgastan el puerto USB C, aunque evidentemente, no es la única razón: la acumulación de suciedad, como polvo, pelusas y otros residuos (restos orgánicos, textiles) pueden provocar un mal funcionamiento.
De igual manera, y a pesar de que muchos teléfonos son resistentes a la entrada de agentes externos (lo marca su certificación IP en relación al agua y polvo), que el puerto se exponga a líquidos puede provocar corrosión y cortocircuitos. Y no olvidemos el desgaste natural que como cualquier otra cosa en la vida, termina afectando.
Cuando hablamos de que el puerto se rompe, no tiene porque dejar de funcionar completamente. Puede presentar un comportamiento anómalo, lo que se llama comúnmente un "mal contacto", y que cargue en ocasiones o solo en ciertas posturas. Todo dependerá de la causa y la gravedad del daño, que por ejemplo un cortocircuito lo arruinará para siempre. En cambio, un desgaste menor puede presentarse en forma de carga lenta.
Cuidar el puerto USB-C es cuestión de lógica
Como pieza pequeña que es, conviene tratarlo como se merece, más aún considerando la gran importancia que tiene. En ciertos momentos, no podemos evitar dar un tirón (salir de casa con prisas no es bueno); en otras, no podemos evitar que se moje o se humedezca, pero el cuidado se aplica cada día, y se aprecia en el largo plazo.
Algunas recomendaciones para cuidar el puerto USB-C de tu móvil son:
- Conecta y desconecta el cable con suavidad, sin movimientos bruscos ni ángulos extremos.
- Limpia el puerto regularmente: usa aire comprimido o un cepillo suave. Nunca usar objetos metálicos o punzantes.
- Utiliza cable y cargador original, o en su defecto certificados por el fabricante o que provengan de marcas confiables.
- Evita entornos húmedos y las altas temperaturas.
- Si no queda más remedio que mojarlo, sécalo inmediatamente en cuanto salga del agua.
No menos importante es el orden óptimo de carga. ¿Sabes en qué orden debes conectar cable, cargador y móvil? La forma más segura de cuidar de nuestros cables y teléfonos es unir primero el móvil al cargador (cable mediante) sin conectarlo a la corriente. Una vez hecho, procede a enchufarlo a la toma de pared. Así evitamos una pequeña chispa que se da por los voltajes positivos y negativos cuando insertamos el cable en el teléfono.

Además de los cuidados mencionados anteriormente, podemos recurrir a accesorios externos para protegerlo. Por ejemplo, el uso de tapones evitará que entre suciedad, y de paso lo protege ante golpes directos. Algunas fundas los incorporan, también puedes adquirirlos por separado.
De esta manera, el puerto de carga aguantará mejor el paso del tiempo, y por ende el teléfono también prolongará su vida útil. El cuidado preventivo es clave para mantenerlo en buen estado, que cuando presenta fallos solo nos quedará pasar por el servicio técnico (con la espera que conlleva) o repararlo nosotros mismos (habrá que asumir la pérdida de garantía).
En Xataka Android | Entretener a tus pasajeros con Android Auto es fácil si sabes cómo compartir la pantalla de tu móvil
En Xataka Android | Estas funciones llegaron con Android 15 y no puedo vivir sin ellas. Precisamente por eso se ha convertido en mi versión favorita
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La noticia
El puerto USB-C es una de las piezas más delicadas de nuestro móvil. Así hay que cuidarlo para que no se rompa
fue publicada originalmente en
Xataka Android
por
Pepu Ricca
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