El papa tiene un cuadro clínico "complejo" que obliga a los médicos "a modificar la terapia"
La Santa Sede ha informado de que "requerirá de una hospitalización adecuada".

Las pruebas realizadas en los últimos días y este lunes al papa Francisco "han demostrado una infección polimicrobiana del tracto respiratorio que ha obligado a modificar aún más la terapia". Así lo ha especificado en un comunicado el Vaticano, que ha subrayado que tiene "un cuadro clínico complejo".
"Todas las pruebas realizadas hasta el momento son indicativas de un cuadro clínico complejo que requerirá de hospitalización adecuada", se lee en el comunicado del Vaticano, que hace prever que Francisco seguirá ingresado aún varios días, después de que entrara el viernes en el hospital Gemelli de Roma.
El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, ha aclarado que no se trata de un "agravamiento", sino que el cambio del tratamiento se debe una lectura de los análisis realizados en los días pasados y muestran una evolución más completa de la patología, en este caso, una infección polimicrobiana.
Por tanto, no se ha hablado de una fecha para que se le dé el alta, ha aclarado, al tiempo que aseguró también que el pontífice argentino "está de buen humor" .
Con anterioridad, Bruni había explicado que Francisco había descansado bien y pasado "tranquilo" su tercera noche ingresado en el Gemelli, mientras continúa su tratamiento para la infección de las vías respiratorias por la que tuvo que ser ingresado el pasado viernes. "Ha desayunado y se ha dedicado a la lectura de los diarios", añadió el portavoz a los periodistas.
Hoy se ha sabido que, a pesar de estar ingresado, el pontífice llamó tanto el viernes como el sábado a la parroquia de la Sagrada Familia, la única iglesia católica de Gaza.
"Nos llamó el viernes y el sábado, tenía la voz un poco cansada pero estaba de buen humor y quiso saber cómo estábamos", ha explicado un colaborador de la parroquia en un canal de televisión del grupo italiano Mediaset.
El papa llama todos los días, desde que empezó la guerra, a la parroquia, donde encuentran refugiadas 600 personas, y ha querido seguir haciéndolo durante su hospitalización.
Solo ayer, domingo, no llamó, pero ya había avisado de que ese día descansaría, han explicado desde la iglesia, cuyo párroco es el sacerdote argentino Gabriel Romanell.
Francisco transcurrió sin novedades su tercera noche en el hospital Gemelli de Roma, donde se está curando de una infección en las vías respiratorias, y este lunes se espera una actualización sobre los posibles días de hospitalización, pues su agenda estaba anulada solo hasta hoy.
El papa, de 88 años, afirmaba la mañana de este domingo que todavía necesitaba tratamiento para recuperarse de la enfermedad y agradeció el cuidado de los médicos y enfermeros del centro hospitalario.
"Me hubiera gustado estar entre ustedes pero, como saben, estoy aquí en el Policlínico Gemelli porque todavía necesito algún tratamiento para mi bronquitis", indicó el papa en el discurso de la oración del Ángelus que dejó escrito al no poder pronunciarlo.