Los colegios concertados que separan a sus estudiantes por sexo se están viendo obligados a decidir entre renunciar al dinero público o apostar por el modelo diferenciado, pasando a ser completamente privados. Los centros que separan a alumnos de alumnas suponen en torno a un 1% de la totalidad de centros educativos en España (existen unos 70). Según cifras de CECE (Confederación Española de Centros de Enseñanza), más o menos la mitad de los centros que diferencian por sexos son concertados. Sin embargo, están condenados a desaparecer. Existe la salvedad de la Comunidad de Madrid, que decidió ampliar la caducidad de los conciertos hasta 2027 y de Andalucía, donde estos centros son de titularidad privada. Pero no es la norma...
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