Si Luka no tuviese papada

La cuestión de siempre pero en clave púrpura y dorada. Vienen los playoffs. Las defensas. Y Luka Doncic con sus claroscuros: la asimetría entre talento y esfuerzo. La entrada Si Luka no tuviese papada se publicó primero en NBAManiacs.  Source: NBAManiacs

Abr 11, 2025 - 21:40
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Si Luka no tuviese papada
Luka Doncic firmando autógrafos como jugador de los Lakers

«¡Ah!, cómo poder confesar la debilidad de un sentido
que en mí debería existir en un estado de mayor perfección,
en una perfección tal que muy pocos músicos
la hayan conocido jamás.
¡Oh!, no puedo más; perdonadme también
si me veis mantenerme al margen, cuando
me uniría gustosamente con vosotros
».


Éste es un fragmento del Testamento de Heiligenstadt que Ludwig van Beethoven –hundido y melancólico por la irreversibilidad de su sordera– escribe a sus hermanos Karl y Johann en 1802 a modo de despedida cuando, abatido por la situación, valora seriamente la idea del suicidio.

Seis años después, habiendo perdido el oído casi por completo, compone su Quinta Sinfonía. Y a los ocho, en 1810, su icónica bagatela Para Elisa.

Nunca llegó a enviar la carta a sus hermanos.

#NBASundays en el Paycom Center

El pasado domingo, el titular del folleto fue que Luka Doncic dio una cátedra de básquet ante el favorito de la Liga para llevarse el MVP, Shai Gilgeous-Alexander. Que la mente de los Lakers fue más veloz que las piernas de los Thunder.

Ambas cosas fueron rotundamente ciertas. A lo que añado: no podía ser de otra manera. Para que los Lakers ganen a estos Thunder tiene que ser así; a día de hoy, no hay otro camino.

Sin la magia de Luka a estándares merlinescos, no hay vía por la que doblegar a OKC en una serie sostenida de playoffs (que es lo que aquí nos debe importar). Un chaparrón de triples te hace ganar en una noche aislada; pero una golondrina no hace verano.

Mi problema (y el de los Lakers) no es que Nico Harrison tuviera algo de razón, sino preguntarme qué planes tienen Rob Pelinka y J.J. Redick para detener esta bala en el corto/medio y largo plazo.

La bala que cada año aleja a Luka de MVP y la que, en este 2025, exige de su brillantez máxima en ataque para mantener equilibrada la balanza con los otros favoritos al título de campeón.

Los ojos en Luka

Primero, os animo a ver de nuevo la exhibición de 30 puntos del as esloveno del pasado domingo y reflexionar sobre cómo llega cada una de las canastas y el modo en el que consigue Doncic hacer valer su superioridad.

Una vez hecho –aquí iremos más despacio–, os pediré que le deis al play a este otro vídeo; que apartéis la mirada del balón y os fijéis con detenimiento en ‘lo que hace’ Luka en cada una de las canastas de su rival. Directa e indirectamente.

¿Visto el vídeo? Bien. Es así en cada partido. Sin excepción.

El cuento de que los Lakers defendían mejor con Luka que sin él –y que casi nos confunde durante el primer mes, fruto de un team defensive rating favorablemente demoledor– se terminó.

Y aunque la estadística avanzada todavía no lo pone colectivamente en evidencia, vídeos como éste de arriba sí lo hacen, recordándonos que Doncic, una bestia parda del baloncesto y tal vez el jugador con el techo más alto del planeta NBA (a la espera de Wemby), no está ni cerca de su máximo potencial.

Ver a Stephen Curry, un guard de 37 años, bailar como lo hizo a otro base de 26, incapaz de hallar respuesta en su tren inferior, fue la alarma definitiva que esperaba J.J. Redick para asumir que a Luka había que esconderlo en adelante todo lo posible, con el fin de evitar el bochorno en los highlights del día siguiente.