“No es nuestra guerra”: prorrusos impulsan una protesta contra el apoyo de España a Ucrania
La onda expansiva del choque entre Donald Trump y Volodímir Zelenski en su reunión en la Casa Blanca está teniendo múltiples consecuencias. El debate sobre una posible intervención militar europea en Ucrania se ha redoblado, y en ese...

La onda expansiva del choque entre Donald Trump y Volodímir Zelenski en su reunión en la Casa Blanca está teniendo múltiples consecuencias. El debate sobre una posible intervención militar europea en Ucrania se ha redoblado, y en ese contexto se ha convocado una manifestación por la “neutralidad” de España en este conflicto.
La convocatoria se ha empezado a difundir este lunes 3 de marzo, principalmente a través de X (antes Twitter) y de Telegram. La han hecho circular perfiles marcadamente prorrusos, como Liu Sivaya, Rubén Gisbert y Beatriz Talegón, y canales también dedicados a extender el eco de la propaganda prorrusa, como ‘Alena Rusa’, ‘Vakulinchuk’ y ‘Desinformador ruso’.
“Ha llegado la hora… 9M - NO ES NUESTRA GUERRA. 12:00 Congreso de los Diputados (Madrid)”.
Así comienza el mensaje, que llama a salir a la calle este próximo domingo “ante la deriva belicista de la clase política europea en relación con la guerra de Ucrania y la toma de decisiones unilateralmente que comprometen gravemente la seguridad y porvenir de España”.
En ese contexto, los convocantes (que no se identifican en los mensajes ni carteles que circulan) exigen “la neutralidad de España en dicho conflicto del mismo modo que otras naciones europeas y miembros de la OTAN como Eslovaquia”. El gobierno de ese último país, dirigido por Robert Fico, es muy crítico con la posición dominante en la OTAN y la UE de apoyar a a Ucrania frente a Rusia.
Los impulsores de la manifestación claman por el “¡No a la guerra, neutralidad, no es nuestra guerra!”.
Argumentan que “no podemos permanecer impasibles mientras se involucra a España en un conflicto alejado de los intereses nacionales y alineado con los intereses de unas élites corporativas cuyo negocio es la guerra y el armamento”.
Añaden que “España atraviesa gravísimos problemas económicos y de desarrollo en un contexto en el que cada vez somos menos competitivos y la población cada día sufre los brutales aumentos impositivos, tributarios e inflacionarios. No estamos dispuestos a seguir empeorando esta situación destinando recursos a una guerra de potencias extranjeras y descuidando nuestros propios intereses”.
La difusión se ha producido de forma muy coordinada entre todos los canales y cuentas citados.
Las imágenes de la convocatoria muestran una manifestación callejera, con banderas rojigualda pero sin escudo, y una mano blanca con manchas rojas que se alza. Destaca la palabra “Paz” y “no es nuestra guerra”.
Curiosamente, el mensaje no cita ni a Rusia, ni a Estados Unidos, ni a Donald Trump, ni siquiera a Zelenski. Sólo acusa en abstracto a “la clase política europea” y a las “élites corporativas”.
Uno de los primeros en difundir, Rubén Gisbert, ya impulsó una convocatoria similar en octubre de 2024. Participó en la manifestación que convocó Junta Democrática de España (organización que él fundó y presidió hasta 2024), que se celebró en Madrid con la asistencia de otras personas conocidas por sus mensajes favorables a Rusia, como el coronel retirado Pedro Baños.