La viva imagen del agotamiento en el Real Madrid: los jugadores, arrodillados sobre el césped tras el partido ante el Villarreal

Tumbados sobre el césped, arrodillados o descansando sobre sus rodillas se vio a los jugadores del Real Madrid, en lo que significó la viva imagen del agotamiento, tras el pitido final del partido ante el Villarreal en La Cerámica, disputado con 66 horas de descanso en las piernas de los futbolistas del conjunto blanco tras la eliminatoria europea ante el Atleti.

Todas las miradas estaban puestas sobre el la entidad madridista y sus futbolistas en la vigesimoctava jornada de Liga, después de que el club anunciase a través de su televisión oficial que no volvería a jugar un partido sin que hubiese pasado el mínimo de 72 horas que recomienda la FIFA desde el encuentro anterior.

El brutal duelo de 120 minutos en el Metropolitano dejó sus primeras 'víctimas' antes del partido: Vinícius, sustituido en el tramo final de la prórroga y ausente del entrenamiento del equipo este viernes, y Rüdiger, lesionado justo antes de la vuelta ante el Manchester City y enfermo antes del partido ante el Rayo, empezaron en el banquillo.

Otros como Mbappé y Bellingham jugaron de principio a fin después de haber disputado también íntegro el choque ante el Atlético de Madrid, chutando y anotando sus respectivos penaltis en la tanda, lo que les dejó sin fuerzas al pitido final: el francés descansó sobre sus rodillas para recuperar el aliento, mientras que el inglés se derrumbó de rodillas sobre el césped.

Eduardo Camavinga, Aurélien Tchouaméni y Fran García también se dejaron caer sobre el césped, donde permanecieron sentados un instante para reponer energías antes de retirarse al vestuario.

"Es la ultima vez que jugamos un partido antes de 72 horas de descanso. Hemos pedido dos veces a LaLiga cambiar el horario y no ha pasado nada. Esta es la última vez", dejó claro Carlo Ancelotti en una rueda de prensa en la que aseguró que el Madrid no se presentaría al partido de volver a tener menos tiempo de descanso del recomendado.

El italiano, además, puso en valor el gran esfuerzo de sus jugadores: "Estoy orgulloso de este equipo porque era un partido trampa por las horas de descanso y por el juego del Villarreal. Hemos aguantado a nivel físico, pero el equipo ha acabado mermado y agotado. Lo que hemos hecho dice mucho de este equipo y de los recursos de la plantilla".