La mutación de una frase y sus consecuencias
"La frase de Beatrice Hall ha mutado en “Detesto lo que dices… y te lo haré pagar muy caro’. Una mutación preocupante".

“Detesto tus ideas, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a expresarlas”. Esa frase de Beatrice Evelyn Hall (1868-1956), biógrafa de Voltaire, define la cultura occidental. En su nombre, cientos de miles de personas salieron a la calle con el lema ‘Je suis Charlie’ cuando la revista ‘Charlie Hebdo’ fue atacada, en 2015, por terroristas de Al Qaeda. Mataron a 12 personas en la redacción, entre ellas a los autores de unas viñetas de Mahoma con una bomba a modo de turbante.
No importa lo ofensivos que eran esos dibujos; ante el ataque de los monstruos, hay que ser Charlie. Entonces, y siempre, como dijo el domingo la productora María Luisa Gutiérrez en su atinado discurso del premio Goya por ‘La infiltrada’, hay que defender la libertad de expresión como base de la democracia.
Las palabras de María Luisa Gutiérrez, sin llantos ni exaltación de la familia, destacaron por su defensa de cosas aparentemente obvias. Dedicó su premio a las víctimas de ETA; abogó por la memoria de lo cercano... Y, sí, defendió la libertad de expresión ahí donde la actriz Karla Sofía Gascón se hubiera paseado en triunfo si no hubiera sido por la exhumación de unos tuits xenófobos y racistas.
Son tan zafios que cuesta decir ‘Je suis Karla’. Pero el severo castigo a la actriz, jaleada como primera persona trans candidata al Óscar, y castigada, desaparecida y lapidada después por ser una persona trans con opiniones censurables, indica que la frase de Beatrice Hall ha mutado en “Detesto lo que dices… y te lo haré pagar muy caro’. Una mutación preocupante que obliga a volver a la frase original: “Detesto tus ideas, pero...”