La calma de Powell para bajar los tipos de interés enfría el rally del oro
El lingote se aleja de los 3.000 dólares después de que el presidente de la Fed, el banco central de Estados Unidos, advirtiese a los senadores de que sería paciente antes de flexibilizar aún más la política monetaria.

El oro frena su subida y retrocede desde máximos histórico, después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijera que no hay prisa por aplicar más recortes en los tipos de interés. El lingote se aferra a los 2.900 dólares por onza. Powell dijo a los senadores el martes que el banco central de Estados Unidos sería paciente antes de flexibilizar aún más la política monetaria. Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años subieron, lo que representa un obstáculo para el oro, ya que este no genera intereses.
El oro ha subido con fuerza este año, estableciendo récords sucesivos y posiblemente preparándose para probar la marca de 3.000 dólares por onza. Este repunte ha sido impulsado por una mayor demanda de refugio seguro, ya que el presidente de EE.UU., Donald Trump, ha tomado una serie de medidas agresivas en materia comercial, incluyendo un arancel planificado sobre las importaciones de acero y aluminio.
Los operadores intentan evaluar las posibles implicaciones para la economía estadounidense y la política monetaria en caso de que la postura de la Casa Blanca sobre el comercio y la inmigración reavive la inflación y afecte el crecimiento. Durante su testimonio, Powell afirmó que no era prudente especular sobre la política arancelaria. El reciente ascenso del oro ha venido acompañado de entradas de capital en fondos cotizados en bolsa respaldados por lingotes. Las tenencias globales han aumentado en seis de las últimas siete semanas, alcanzando su nivel más alto desde noviembre, según cálculos de Bloomberg.
Los bancos han pronosticado que un intento de alcanzar el umbral de los 3.000 dólares es probable. Entre ellos, Citigroup dijo la semana pasada que esperaba que el oro llegara a ese nivel en un plazo de tres meses, impulsado por tensiones geopolíticas y guerras comerciales que aumentan la demanda de activos más seguros.