Juan Arturo Brennan: No tan desconocido

U n completo desconocido (A complete unknown, James Mangold, 2024) es una biopic que narra la parte sustancial de la carrera (y la transformación) de Bob Dylan, sobre quien no hace falta añadir nada aquí. Se trata de un filme interesante, atractivo y con más logros que carencias; después de todo, una película en la que se puede mirar y escuchar a Dylan, Joan Báez, Woody Guthrie, Johnny Cash, Sonny Terry, Brownie McGhee, Bobby Neuwirth, bien caracterizados como personajes y como músicos, no puede ser mala. Entre los varios hilos narrativos del filme, bien trenzados gracias al guión de Mangold y del crítico y guionista Jay Cocks, habría que destacar dos. El primero, la aguerrida rebelión de Dylan en contra de las expectativas de sus fans, sus colegas, y los tiburones de la industria musical, y el sacrilegio de su transición a lo eléctrico. En esta vertiente de la película, Mangold aporrea merecidamente a los managers, los publicistas, los magnates disqueros y los fans. El segundo es su relación con la cantautora Joan Báez, en cuya descripción Mangold evade, como en otros aspectos de su filme, los lugares comunes del género y los peligros del melodrama lacrimógeno.

Feb 22, 2025 - 14:13
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Juan Arturo Brennan: No tan desconocido
U n completo desconocido (A complete unknown, James Mangold, 2024) es una biopic que narra la parte sustancial de la carrera (y la transformación) de Bob Dylan, sobre quien no hace falta añadir nada aquí. Se trata de un filme interesante, atractivo y con más logros que carencias; después de todo, una película en la que se puede mirar y escuchar a Dylan, Joan Báez, Woody Guthrie, Johnny Cash, Sonny Terry, Brownie McGhee, Bobby Neuwirth, bien caracterizados como personajes y como músicos, no puede ser mala. Entre los varios hilos narrativos del filme, bien trenzados gracias al guión de Mangold y del crítico y guionista Jay Cocks, habría que destacar dos. El primero, la aguerrida rebelión de Dylan en contra de las expectativas de sus fans, sus colegas, y los tiburones de la industria musical, y el sacrilegio de su transición a lo eléctrico. En esta vertiente de la película, Mangold aporrea merecidamente a los managers, los publicistas, los magnates disqueros y los fans. El segundo es su relación con la cantautora Joan Báez, en cuya descripción Mangold evade, como en otros aspectos de su filme, los lugares comunes del género y los peligros del melodrama lacrimógeno.