El truco de un ingeniero para que la sal no se quede pegada
A pesar de que el truco de meter arroz en un salero sea el más popular, con este nuevo 'tip' que ha compartido Tomás Gill en su perfil de instagram solo se necesitan unos segundos en el microondas.

¿Cuántas veces habéis visto que se han formado grumos, terrones, de sal que no os dejan cocinar bien? Estamos seguros de que muchísimas, y todos coincidimos: es un incordio absoluto. Sobre todo si están en un salero, porque directamente estos grumos no dejan que salga la sal por los orifícios y no se puede sazonar la comida.
Para solucionar este problema, un truco que pasa de generación en generación en España consiste en meter granos de arroz en el salero, o café para que absorban la humedad que provoca esos grumos de sal. Pero nada que ver, hay un truco más eficaz y solo se necesita un microondas.
Secar la sal en el microondas
El truco del microondas lo ha subido a sus redes el ingeniero alimentario, Tomás Gill, conocido en Instagram como @curiosidadalimentaria y que cuenta con más de cien mil seguidores a sus espaldas, por lo que sus ‘tips’ son virales y realmente eficaces.
En este caso, Gill, enseña a su comunidad virtual que basta con meter el salero dentro del microondas durante unos segundos a máxima potencia para que esos grumos de sal pegada se disuelvan y recupere la soltura natural. También recalca, para la seguridad del electrodoméstico, quitar cualquier elemento de metal o plástico que pueda tener el salero, ya que pueden saltar chispas y quemar el microondas.
Así, siguiendo la técnica de este ingeniero, se puede recuperar la sal en segundos y dejarla lista para sazonar cualquier alimento, aunque hay que esperar un poco a que el salero se enfríe porque estará muy caliente después de sacarlo del microondas.
¿Por qué se forman grumos en el salero?
Tomás Gill también ha dado respuesta a la pregunta que muchas personas se hacen en su casa cuando ven la sal pegada entre sí. En el vídeo, Gill explica que esto se debe a que la sal es higroscópica, que quiere decir que absorbe la humedad que haya en el ambiente donde esté guardada.
De esta forma, el agua del entorno se queda en los granos de sal, y cuando se guarda en el salero no puede salir por los agujeros que tiene, así que se condensa y se forman esos pegotes o grumos que son tan incómodos.
Sabiendo esto, se entiende que otros trucos para secar esos pegotes pasen por meter granos de arroz o café dentro del salero, porque estos dos alimentos comparten la capacidad de absorber la humedad del ambiente, quitándosela a los granos de sal y dejándola suelta y lista para utilizar. De hecho, este método es el más utilizado en cualquier lugar por su simpleza.