El pueblo de Sevilla con iglesias, conventos, vestigios romanos y hasta ocho palacios

La ciudad de Sevilla fascina a cualquiera que pone un pie en ella, y es que la urbe hispalense tiene algo que atrapa tanto a quienes viven en ella como a los turistas que la visitan desde otras partes de España. Pero en la provincia sevillana hay otros muchos lugares apasionantes además de la 'Perla del Guadalquivir', y es que está repleta de localidades increíbles ideales para los amantes del turismo rural. Prueba de ello es el precioso pueblo de Écija, uno de los más importantes de la región.

Superado en población en la provincia solo por la propia ciudad, Dos Hermanas, Alcalá de Guadaíra y Utrera, este municipio de 40.000 vecinos es uno de los más especiales de toda Sevilla. Situado a tan solo una hora por carretera de la Giralda, la catedral y el Archivo de Indias, Écija cuenta con un patrimonio arquitectónico sublime que hacen del pueblo un lugar único en Andalucía y uno de los más especiales de toda España.

La riqueza patrimonial de Écija, a una hora de Sevilla

El gran ejemplo de la majestuosidad arquitectónica que se puede ver en Écija son sus iglesias. En el propio portal turístico de la localidad se destacan hasta 14 templos que se encuentran en el municipio, todos ellos de una belleza descomunal. La Iglesia de Santa Cruz, con vestigios visigodos, o la increíble Iglesia de Santa María y su bonito claustro son solo algunos de los ejemplos de la preciosidad de los templos ecijanos, algo que también ilustran la Iglesia de Santiago, la de San Juan, la de Santa Bárbara o la de San Gil, entre otras muchas que hay en la villa.

Tampoco se pueden obviar los espectaculares conventos que se pueden visitar en Écija, desde el sublime Convento de Santa Florentina, que data del siglo XV, hasta el de la Merced, construido unos años más tarde. El de la Santísima Trinidad y Purísima Concepción, más conocido como 'Las Marroquíes' en honor a su fundadora, o el de la Visitación de Santa Isabel también son paradas imprescindibles si se hace una escapada a Écija, al igual que el de San José, el de la Divina Pastora o el Real Monasterio de Santa Inés del Valle.

Otro de los principales atractivos turísticos de Écija son sin duda sus increíbles palacios, y es que en la localidad hay hasta ocho palacetes extraordinarios, muchos de ellos del siglo XVIII. Algunos, como el de Benamejí (uno de los principales del pueblo) son claros ejemplos de arquitectura barroca, aunque hay más que también deslumbran a los turistas, como el de Peñaflor, el de los Palma o el Palacio de Justicia.

Otros como el de la Casa Palacio de los Pareja (actual biblioteca municipal), el de Alcántara, el de Valdehermoso o el de Santaella también dejan boquiabiertos a los amantes de la arquitectura, y dan a Écija, más si cabe, ese aspecto de importancia histórica que preserva en las principales calles de su casco histórico.

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