Daredevil: Born Again entrega su episodio más intenso con un juicio que lo cambia todo

Matt Murdock se enfrenta el caso más complicado de su carrera mientras Kingpin mueve sus fichas (Aviso de spoilers)

La tercera entrega de Daredevil: Born Again ha dejado claro que Marvel Studios está apostando fuerte por el lado más legal y psicológico de Matt Murdock, alejándose temporalmente de la acción tradicional para centrarse en su faceta de abogado. Adaptando libremente el arco Juicio del Siglo, escrito por Brian Michael Bendis, este episodio nos sumerge en una batalla legal en la que Daredevil no necesita ponerse su traje rojo para impartir justicia.

Con el juicio de Tigre Blanco como eje central de la trama, el capítulo no solo explora el talento de Matt en la sala de audiencias, sino que también nos muestra su lucha interna entre la justicia y la venganza. Mientras tanto, Wilson Fisk sigue moviendo los hilos en la sombra, permitiendo que una guerra de bandas desate el caos en Nueva York. Sin olvidar la misteriosa red de policías que parecen tener una obsesión con Punisher, lo que nos deja entrever que Frank Castle está más cerca de lo que pensamos.

Un episodio que redefine el papel de Daredevil en el UCM

Desde su regreso en Spider-Man: No Way Home, Matt Murdock ha sido presentado principalmente como abogado. Su paso por She-Hulk reforzó esta idea y ahora, con Born Again, Marvel Studios parece decidido a consolidar su lugar dentro del UCM como el defensor legal definitivo.

Este episodio juega magistralmente con esa dualidad entre la justicia legal y la callejera. En una serie que hasta ahora ha prescindido de grandes dosis de acción, la narrativa sigue manteniendo una tensión constante. La forma en la que se sustituye la iglesia por el tribunal y el confesionario por una celda lúgubre nos recuerda que Daredevil no solo es un superhéroe atormentado, sino un hombre de fe y principios que constantemente se enfrenta a dilemas morales.

El desenlace del juicio deja una marca indeleble en la serie. Matt gana el caso, pero lo hace a costa de exponer la identidad de su cliente, poniendo un blanco sobre su espalda. Esta decisión no solo afecta a Tigre Blanco, sino que refleja el propio estado mental de Murdock, quien, a pesar de haberse alejado del manto de Daredevil, parece condenado a volver a él.

Kingpin y su juego de poder en Nueva York

Mientras Matt Murdock lucha en los tribunales, Wilson Fisk continúa su meticulosa estrategia para consolidar su dominio en la ciudad. El episodio muestra cómo Kingpin no solo manipula el conflicto entre las bandas criminales, sino que también aprovecha el caso de Tigre Blanco para reforzar su narrativa en contra de los vigilantes.

Fisk no busca simplemente ser el Rey del Crimen. Quiere convertirse en la ley misma. Y eso queda aún más claro cuando vemos cómo utiliza a los medios de comunicación para moldear la opinión pública en su favor. Con cada movimiento, Kingpin demuestra que su poder no radica solo en la fuerza bruta, sino en su capacidad para jugar a largo plazo.

La inminente llegada de Punisher

Desde el primer episodio, la serie ha estado dejando pequeñas pistas sobre el regreso de Frank Castle, y este capítulo ha sido la confirmación definitiva. La presencia de un grupo de policías obsesionados con el símbolo de Punisher y los rumores de bandas utilizando su emblema como una marca de terror dejan claro que su regreso será brutal y estará acompañado de una ola de sangre y venganza.

La gran incógnita es cómo Castle se verá envuelto en esta historia y si su reaparición será como un aliado o una amenaza para Daredevil. Lo que sí es seguro es que, cuando Frank descubra que su símbolo está siendo usado sin su permiso, la represalia será devastadora.

El desgarrador final y lo que viene para Daredevil: Born Again

El episodio cierra con una de las escenas más impactantes de la serie hasta ahora. Cuando parecía que Tigre Blanco había logrado salir adelante, la historia nos da un giro inesperado y brutal. La forma en que se ejecuta su destino nos recuerda que esta serie no teme tomar riesgos y que, al igual que en la etapa de Netflix, Daredevil sigue siendo un personaje rodeado de tragedia.

Por otro lado, se han dejado en el aire múltiples interrogantes. Kingpin está más cerca de consolidar su visión de Nueva York, Matt Murdock ha sido empujado nuevamente hacia su papel de justiciero, y Punisher está a punto de irrumpir en la historia con su propia agenda de justicia.

Con cada episodio, Daredevil: Born Again sigue demostrando que Marvel Studios no solo respeta el legado del personaje, sino que también está construyendo un nuevo camino que lo redefine dentro del UCM.

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Esta noticia ha sido publicada por Cinemascomics.com