Albares se lleva mal con la mayoría de periodistas porque se toma como personales las críticas institucionales

La tensión entre el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y la mayoría de los periodistas viene de lejos. Tal como le cuentan a El Chivato, la situación se ha vuelto ‘insostenible’. Motivo: se toma con un asunto personal las críticas institucionales.

“En los medios existe una línea editorial, y algunas cosas no se hacen bien en el ministerio y se cuentan. No es algo personal, pero su manera de encajarlo, dificulta mucho la relación con él”, confiesan. Y concluyen: “Es muy complicado tratar con Albares”.

Las críticas a las figuras públicas no son algo nuevo ni extraño en el ámbito político, pero la reacción del ministro ante esos comentarios parece haber cruzado una línea que genera controversia: las críticas a la gestión Albares tiende a personalizarlas, y en ocasiones se involucra emocionalmente con los periodistas.

Esta situación ya la ha sufrido Confidencial Digital, cuando Asuntos Exteriores le excluyó de un encuentro ‘off the record’ en el que se habló sobre los planes inmediatos del departamento, entre otros asuntos.

A la reunión fueron convocados una veintena de medios que habitualmente cubren las informaciones relacionadas con el Ministerio y la política exterior, pero en el grupo no fueron incluidos los representantes de medios a los que Albares y su jefe de Comunicación, Antonio Asencio, consideran críticos con el Ministerio.

Lo mismo le ocurrió a The Objective, El Confidencial, El Independiente, que tiene redactores que siguen habitualmente las informaciones del Ministerio.