“Te mato, dale. Dame la plata”: encapuchado y con una cuchilla atacó a un comerciante
La secuencia quedó registrada por las cámaras de seguridad del almacén

La inseguridad en Córdoba no da tregua. Un delincuente encapuchado y armado con una cuchilla irrumpió en un almacén del barrio Güemes en la capital provincial y, con una violencia descontrolada, amenazó al joven comerciante que atendía el local. El ataque, a la vuelta del edificio de Tribunales II, quedó registrado en las cámaras de seguridad del almacén y ocurrió a plena luz del día, a metros de un patrullero que, según testigos, no intervino en el hecho.
El robo ocurrió el viernes pasado a las 11.16, en un almacén situado en la intersección de la Avenida Pueyrredón y la calle Bolívar, cuando el ladrón ingresó con el rostro cubierto sujetando una cuchilla y con una amenaza clara: “Te mato, dale. Dame la plata, la plata de la caja te estoy diciendo. Dale”.
En el audio de la grabación se escuchó cada una de las amenazas mientras el agresor intentó apuñalar al joven comerciante en más de una oportunidad en las que el empleado logró retroceder para no ser herido.
El joven, en un intento desesperado por salvar su vida, se dirige a la caja y comienza a entregar el dinero, pero el criminal lo presiona aún más. “Dale, hacelo por las buenas, quiero la plata. Gil otario. Todos los de mil, todos los grandes. Los que están encanutados, hijo de puta”, gritó antes de darse a la fuga con una última advertencia: “No ‘batas’ a la cana.”
Vecinos asustados
Los vecinos del barrio, indignados, aseguraron que el robo ocurrió a pocos metros de un patrullero, que había sido colocado en modo de prevención tras la ola de asaltos continuos que tiene aterrorizados a los habitantes del barrio Güemes. Sin embargo, al pedir ayuda, la respuesta de los agentes fue alarmante: “Le pedimos ayuda, que se acercara al lugar, y nos dijo que no podía salir porque estaba solo”, explicaron vecinos a El Doce TV.
El ataque en barrio Güemes no es un caso aislado. La semana pasada, un ladrón robó dos veces en el mismo día en una dietética en la calle San Juan. Días antes, otro delincuente asaltó a mano armada un kiosco en la calle Marcelo T. de Alvear y amenazó a la víctima con dispararle. “Me mostró las balas y dijo que iba a disparar”, confesó la víctima a El Doce TV.
La seguidilla de robos generó miedo y hartazgo en los comerciantes y residentes del barrio Güemes y del barrio Observatorio, quienes, en diálogo con Arriba Córdoba, denunciaron que los delitos ocurren a cualquier hora del día y que la presencia policial no es suficiente para frenar la ola delictiva.
“Salimos a la mañana y sabemos que cuando volvemos al mediodía o a la tarde ya estamos en riesgo de que nos arrebaten o nos roben”, reconoció una de las vecinas.
El caso de la verdulera
La semana pasada se produjo una “detención ciudadana” en la capital de Córdoba, cuando entre comerciantes y vecinos detuvieron a ladrón y lo ataron a un árbol hasta que llegó la policía provincial y se lo llevó detenido.
El hecho, que quedó registrado en las cámaras de seguridad públicas, se originó en una verdulería situada sobre la avenida Leandro Alem al 3600, en el barrio General Mosconi y ocurrió en la tarde del domingo.
Lo que muestran las imágenes es la secuencia en la cual un delincuente, que tenía un cuchillo, intenta robar en el comercio en un horario y día donde el tránsito peatonal y vehicular es bajo. Sin embargo, ante la resistencia de la trabajadora, se ve cuando el delincuente intenta huir y la empleada lo corrió.
Incluso, vecinos ayudaron a la comerciante para retener al ladrón, de 38 años, que no logró huir y terminó atado a una palmera situada en la puerta del comercio en el que había querido robar.
Minutos más tarde y tras un llamado de los vecinos, efectivos de la policía provincial llegaron hasta el lugar donde desataron al ladrón y la detuvieron. Además, secuestraron el cuchillo con el que había amenazado a la comerciante y la cuerda con la que lo habían atado a la palmera.
En una entrevista con El Doce TV, la dueña de la verdulería, identificada como Felipa Megia, contó: “Estaba trabajando dentro, me agarró de atrás y me apuntó con el cuchillo en el hombro. Yo me asusté y me caí. El muchacho salió corriendo y yo salí detrás de él”.
“Afuera, gracias a mis vecinos, lo atrapamos. Yo me asusté mucho. Me quería robar y yo le grité. Después llamé a mi marido y mi hijo que vinieron rápido. Los vecinos me ayudaron porque me asusté”, explicó la mujer, que dijo que se siente agradecida por el accionar de sus vecinos que la defendieron.